TIENE EN SU CESTA DE LA COMPRA
en total 0,00 €
Suscríbete a nuestras novedades
Viví así, solo, sin nadie con quien hablar verdaderamente, hasta que tuve una avería en el desierto del Sahara, hace seis años. Algo se había roto en mi motor. Y como no tenía conmigo ni mecánico ni pasajeros, me dispuse a realizar, solo, una reparación d